Los sistemas de riego son esenciales para mantener un jardín saludable y bonito. En Jardinería Edén, como expertos en instalación de sistemas de riego en Pontevedra, te podemos confirmar que existen diferentes tipos de riego que se adaptan a las necesidades de cada planta, del clima y del espacio disponible. En este artículo repasamos los sistemas de riego más habituales en jardinería y te damos algunos detalles importantes sobre su funcionamiento.
Riesgo por aspersión
El riego por aspersión consiste en distribuir el agua mediante unos dispositivos que la pulverizan en forma de lluvia. Este sistema es muy utilizado en jardines grandes, ya que permite cubrir una superficie amplia con pocos puntos de riego. Además, la propia aspersión favorece la oxigenación del suelo y la eliminación de polvo y plagas.
Riego por goteo
En el caso del riego por goteo hablamos de un sistema que suministra el agua directamente a la raíz de las plantas, mediante unos tubos con pequeños orificios o goteros. Se trata de un riego muy eficiente, ya que ahorra agua y evita la evaporación y las pérdidas por escorrentía. Además, el riego por goteo permite controlar la cantidad y la frecuencia del riego, adaptándolo a las necesidades de cada planta. También es cierto que su instalación es algo más compleja.
Riego por difusión
Es una opción perfecta para suelos compactos o inclinados. Se utilizan unos difusores que generan una especie neblina, provocando una distribución suave y uniforme. Recomendamos especialmente el riesgo por difusión para jardines con arbustos, macizos de flores o áreas de césped pequeñas. Es muy útil para evitar la erosión del suelo y reducir la evaporación de agua. Además, las raíces de las plantas son mucho más fuertes porque el agua penetra de forma lenta y profunda.
Riego por capilaridad
Cuando regamos por capilaridad lo hacemos aprovechando las ventajas de un sistema que utiliza la capacidad del suelo de absorber el agua desde una fuente cercana. Este sistema se puede realizar mediante unas macetas con un depósito inferior que se rellena con agua o mediante unas mechas que conectan las plantas con un recipiente con agua. Es bastante sencillo y económico de implementar y, además, el riego por capilaridad permite regularlo según la demanda de las plantas, evitando el estrés hídrico. Hay que controlar que no genere un exceso de humedad y salinidad en el suelo.
¿Necesitas un sistema de riego en tu jardín?
Estos son algunos de los sistemas de riego más habituales en jardinería, pero existen otros muchos que se pueden combinar o alternar según las condiciones y preferencias de cada jardín. Lo importante es elegir el sistema que mejor se adapte a las características del suelo, del clima y de las plantas, así como realizar un riego adecuado en cuanto a cantidad, frecuencia y horario. Y para ayudar a lograr todo esto, los expertos de Jardinería Edén en Pontevedra nos ponemos a tu disposición: llámanos y daremos con el riego ideal para ti.